El presente Informe Agroclimatológico tiene dos objetivos:
1.- Escenarios agroclimáticos para el mes de mayo
2.- Proyecciones del evento cálido El Niño e inicio de La Niña.
El evento cálido El Niño continúa su influencia sobre la zona centro-norte de Chile. En la región del
Maule, la ciudad de Curicó acumula, al 7 de mayo, 72 milímetros de lluvia. Lo normal son 66.0
milímetros. Por lo anterior se alcanza un superávit de 9.1%. El sistema frontal del día martes 7 de
mayo también dejo nieve en la cordillera, con una isoterma de 800 a 1.000 metros de altura. Todo
lo anterior es positivo, pues es necesario que el otoño genere todas las posibilidades de lluvia y
nieve porque la incertidumbre, sobre la eventual llegada del evento La Niña a mediados de año,
reduciría las posibilidades de precipitaciones intensas y las correspondientes nevadas durante el
segundo semestre. Prueba de lo anterior es que durante el 2023, a misma fecha, había llovido
solo 35.2 milímetros. Debemos recordar que hasta mayo de ese año estuvo presente el evento frío
La Niña.
Los modelos dinámicos y estadísticos permiten proyectar los escenarios de temperaturas y
pluviometría hasta el día 20 de mayo. Desde el punto de vista de las lluvias, después del día 7, no
deberían producirse nuevas precipitaciones. Las tendencias térmicas indican predominancia de
cielos parcial nublados con temperaturas máximas entre 12 a 17° C y, es lo importante, ocurrencia
de heladas matinales. Los valores estimados pueden oscilar entre 0° a -3° C bajo con una duración
temporal entre 3 a 6 horas continuas.
Se recomienda tomar las precauciones frente a estos eventos, los cuales se volverían más
recurrentes en la medida que el evento frío La Niña empiece a generar sus efectos en la zona
central de Chile: cielos despejados, nieblas, frío húmedo y ocurrencias mayores de heladas
radiativas después de cada lluvia esporádica, o por la mayor presencia de masas de aire polar a la
zona central de Chile. Todos fenómenos típicos durante los inviernos con influencia del evento La
Niña.
Evolución del fenómeno La Niña a mayo de 2024
Según el modelo probabilístico, de la Agencia Nacional de la Atmósfera y los Océanos (NOAA) de
Estados Unidos que se muestra en el gráfico, los valores de temperaturas superficiales del mar
(TSM) empezarían a ser negativas a partir de junio. Desde este mes todos los modelos, estadísticos
y dinámicos, pronostican un enfriamiento del océano Pacífico ecuatorial central (área 3.4) incluso
de hasta 2° C bajo la normal. Lo anterior se haría permanente desde agosto a diciembre,
(probablemente continúe el 2025). El mes de Junio estaría siendo el mes de transición a
condiciones La Niña que, al parecer, sería de clasificación “fuerte” en la escala de intensidad.
Por lo expuesto y en las actuales etapas finales del actual evento El Niño, que contribuye a generar
lluvias y nieves desde sistemas frontales fríos, se deberían esperar precipitaciones intensas pero
de corta duración y seguidas de heladas, en mayo y parte de junio.
Finalmente, una de las consecuencias positivas que acompañaría a este fenómeno es la
probabilidad de acumular mayor cantidad de horas-frío (base 7° C) entre 1.000 a 1.600 horas entre
mayo a agosto. Lo anterior estaría favoreciendo la floración primaveral sin dificultades.