Eduardo Fuentes: Una mirada a las principales plagas en cerezos

Smartcherry conversó con Eduardo Fuentes, Profesor Titular de la Facultas de Ciencias Agrarias de la Universidad de Talca, Doctor de la Universidad de Chile y Licenciado en Ciencias Biológicas, Pontificia Universidad Católica de Chile, quien se refirió a las principales plagas que afectan a los cerezos y su impacto en el potencial productivo.

1) ¿Cuáles son las principales plagas que afectan a los cerezos en esta época del año?

Durante la primavera y hasta la cosecha, la plaga más importante para la producción de cerezas en Chile es la mosca drosófila de alas manchadas (Drosophila suzukii). Desde su detección en Chile en el 2017, se ha convertido en un problema creciente para los productores de cerezas y berries. También tienen importancia la escama de San José (Comstockaspis perniciosa), la escama coma (Lepidosaphes ulmi) y el trips californiano (Frankliniella occidentalis). La escama coma y el trips californiano son plagas cuarentenarias para varios mercados asiáticos. Durante el periodo de verano la arañita roja europea (Panonychus ulmi) y la arañita bimaculada (Tetranychus urticae), pueden producir daños en las hojas. Finalmente, en las últimas temporadas los daños causados por el burrito de la vid (Naupactus xantographus) se han ido incrementando.

2) ¿De qué manera puedo prevenir y/o controlar dichas plagas?

Los productores deben avanzar en la implementación de programas de manejo integrado de plagas, los cuales consideran el monitoreo de las plagas para tomar decisiones de control. Además de la aplicación de insecticidas y acaricidas, se deben integrar otras formas de control complementarias. Para el caso de la mosca drosófila de alas manchadas, se deben instalar trampas de monitoreo con atrayentes de fermentación o cebos sintéticos. Si la plaga se encuentra presente en el huerto, se debe realizar la aplicación de insecticidas registrados desde pinta a cosecha. Esta programación debe considerar el registro y periodo de carencia de los insecticidas para el mercado de destino. De igual, forma se deben rotar los insecticidas según su modo de acción para mitigar el desarrollo de resistencia en la plaga. Además, del control químico con insecticidas las prácticas culturales como una cosecha oportuna, la eliminación de fruta sin cosechar en el árbol o el suelo de los huertos, la utilización de riego tecnificado y un buen control de malezas sobre las hileras, son muy favorables para el manejo de esta plaga. Finalmente, la remoción de hospederos silvestres como la zarzamora en los cercos vivos y bordes de canales, también ayuda a reducir la presencia y actividad de esta plaga en los huertos.

3) ¿Qué puede ocasionar en las plantas y en la producción la presencia de plagas en cerezos?

Las plagas producen una disminución de la producción en diferentes formas. La drosófila de alas manchadas daña directamente la fruta, ya que sus hembras colocan huevos en el interior del fruto. De esos huevos eclosan larvas que se alimentan de la pulpa y producen pudriciones. Estos daños no permiten comercializar las cerezas infestadas como fruta fresca. Otras plagas, como la escama coma producen rechazos cuarentenarios, ya que su detección en las inspecciones de fruta impide que las cerezas puedan ser exportadas a varios mercados asiáticos.

4) ¿Cuáles son las principales recomendaciones para los productores en esta época del año, en cuanto a prevención y control de plagas?

Implementar el monitoreo de plagas y programas de manejo integrado de plagas que contribuyan a una producción más sustentable. En esta época de primavera, la instalación de trampas de monitoreo de la mosca drosófila de alas manchadas, que permitan detectar su presencia en el huerto es muy importante. De esta forma se podrá establecer una buena estrategia de protección de la fruta, en el periodo de pinta a cosecha en que es susceptible al ataque de esta plaga.

5) ¿Cuál es la relevancia de un buen estado fitosanitario de un huerto?

La producción de fruta de alta calidad para los mercados de exportación, requiere de un buen estado fitosanitario de los huertos para ser alcanzada. Esto no sólo considera las plagas, sino también las patologías y malezas. En la medida que se manejen en forma integrada y con principios de sustentabilidad, permitirán cumplir las demandas de calidad e inocuidad de los mercados internacionales.