En entrevista con Frutas de Chile, Umut Savan, cofundador de la empresa exportadora Daniur Fresh Fruits and Vegetables, compartió su visión sobre los desafíos que enfrenta la industria de la cereza en Turquía, las variedades más exportadas y los aspectos que aún necesitan ser mejorados.
Turquía: Un gigante en la producción de cerezas

A lo largo de los años, Turquía se ha posicionado como uno de los principales productores y exportadores de cerezas del hemisferio norte, con mercados clave en Europa, Rusia y los países árabes. Umut Savan destacó que la temporada de cerezas en Turquía comienza en mayo y se extiende hasta septiembre, gracias a la diversidad climática del país. «Turquía lidera en la producción de cerezas. Tenemos una geografía privilegiada con cuatro climas que crean las condiciones ideales para su cultivo», explicó Savan.
Sin embargo, señaló que el crecimiento de la industria no debe centrarse solo en la producción, sino también en la modernización de la comercialización y almacenamiento de las cerezas. “En los últimos 20 años, Turquía ha avanzado mucho en estos aspectos, pero aún hay áreas por mejorar. Necesitamos modernizar nuestras instalaciones para protegernos de los daños naturales y mejorar la calidad de nuestras exportaciones”, enfatizó.
Una relación complementaria con Chile
Respecto a la industria chilena, Savan reconoció el liderazgo de Chile como el mayor productor y exportador de cerezas del mundo. A pesar de ello, ve a ambos países como aliados y no competidores, dado que sus temporadas no coinciden. “Los desarrollos en ambos países se complementan, lo que permite un progreso constante en la industria”, afirmó.
El cambio climático: un obstáculo en la temporada actual
Uno de los mayores desafíos para la industria turca de cerezas es el impacto del cambio climático. “Este año, la lluvia y el granizo han tenido un impacto negativo en nuestras cosechas. La temporada actual podría ser más difícil en comparación con la anterior”, señaló Savan, quien destacó que la temporada pasada Turquía alcanzó una producción de 700 mil toneladas, de las cuales 72 mil toneladas fueron exportadas. Sin embargo, advirtió que las cifras de este año podrían ser menores debido a las condiciones naturales y enfermedades de las plantas.
Savan también alertó sobre la gravedad del cambio climático para la agricultura en Turquía. “El calentamiento global provoca sequías en algunas regiones e inundaciones en otras, lo que perturba la estabilidad de la producción. Es crucial tomar medidas para mitigar estos efectos”, insistió.
Variedades de cerezas y consumo en Turquía
Turquía cuenta con diversas regiones productoras, incluyendo Anatolia Central, Egeo, Mármara, Mediterráneo y Manisa, que son responsables de la producción temprana de cerezas en el hemisferio norte. Entre las variedades más destacadas están Brooks y Burlent en las cosechas tempranas, y Z900, una de las variedades de mejor calidad para exportación. En las cosechas tardías, la variedad Sweetheart cumple con altos estándares de calidad.
En cuanto al consumo interno, Savan señaló que los turcos disfrutan las cerezas tanto frescas como en productos procesados. «Las cerezas se utilizan en la industria de zumos, pasteles y mermeladas», explicó.
El trabajo detrás de una cosecha de calidad
Para los productores turcos, la obtención de una cosecha de alta calidad requiere un trabajo constante durante todo el año. “Proteger las cerezas de plagas, virus y fenómenos como el granizo es fundamental. La modernización de las instalaciones de cultivo es clave para asegurar productos de alta calidad y mejorar los retornos para los agricultores”, concluyó Savan.
Fuente: Frutas de Chile.